Tenemos que remontarnos siete años atrás para hablar del comienzo de esta bonita historia.
Oviedo fue la ciudad donde se conocieron, done ella se encontraba, aunque él vivía en Madrid se fueron encontrando a lo largo de toda su vida en cumpleaños de amigos comunes, facultad, academias…el destino vaya.
Cuando contrataron a Ana en Madrid empezó la época de los “nos”, no amigos pero no novios. Ella venía de una relación muy larga y las dudas y los miedos se apoderaban de ella,sin embargo Javier lo tenía claro “El tiempo que necesites pero tú y yo acabamos juntos“.
Su positividad, su carisma, su buen humor la conquistaron, pero hubo un detonante que hizo que no quisiese separarse de él, y es que puso luz a su vida que tan gris se había vuelto, fue la cuerda que consiguió sacarla del pozo en el que se encontraba.
En el aperitivo cantó una chica música tipo soul, blues…con una voz increíble.
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